Mel Gibson y su imponente cambio físico a los 69 años que sorprendió a todos

Mel Gibson ha vuelto a convertirse en noticia y esta vez no es por sus proyectos cinematográficos o sus polémicas declaraciones. En estos momentos tiene 69 años y luce una imagen completamente renovada, resultado de un cambio drástico en su estilo de vida que incluye una notable pérdida de peso. Esta transformación, que muchos califican de asombrosa, ha sido posible gracias a un enfoque riguroso en la alimentación y el fitness, inspirado en la filosofía promovida por figuras como el jefe de la UFC, Dana White y el especialista en salud Gary Brecka.

El artista ha dejado claro que el proceso que ha llevado a cabo no tiene nada que ver con una cuestión estética, lo único que le importa es tener salud y poder dar lo mejor de él en sus nuevas aventuras profesionales.

El cambio de Gibson comenzó cuando decidió seguir la dieta popularizada por Gary Brecka, conocida como la «regla 30:30:30». Este método consiste en consumir 30 gramos de proteínas en los primeros 30 minutos tras despertarse, seguido de 30 minutos de actividad física de baja intensidad. En una reciente aparición en el pódcast The Joe Rogan Experience, el estadounidense compartió detalles de su experiencia con esta dieta.

Cuál es el cambio clave que tuvo Mel Gibson en su físico a los 69 años

No es la primera vez que Mel Gibson adopta cambios radicales en su físico. Hace unos años, durante una visita a Australia, el actor se encontró con el entrenador de salud Sam Jackson en un restaurante de Sídney. Esta casualidad marcó un antes y un después en su vida. «Estábamos en mesas contiguas y comenzamos a hablar. Mel mencionó que estaba frustrado porque no lograba reducir su abdomen, así que le propuse trabajar juntos durante ocho semanas», recordó el experto en nutrición.

El resultado fue espectacular: en tan solo dos meses, Gibson perdió 14 kilos y redujo su cintura en 27 centímetros. El propio actor reconoció que esta transformación tuvo un impacto positivo en su calidad de vida. «Mi ropa me queda mejor, ya no tengo dolores de espalda y duermo más profundamente», declaró Gibson durante una entrevista.

No son pocos los que han puesto encima de la mesa el esfuerzo que está llevando a cabo el artista, pues tiene cierta edad y cualquier cambio supone mucha dedicación.

Uno de los aspectos más destacados del proceso de Gibson es su compromiso continuo con los nuevos hábitos adquiridos. Incluso cuando está fuera de casa por compromisos laborales, mantiene contacto frecuente con sus entrenadores a través de videollamadas. «Es un trabajo constante, pero vale la pena. Ahora como más, pero de manera equilibrada», asegura cuando le preguntan por el tema. Después de mucho tiempo invertido, cree que está en su mejor momento.

La dieta que sigue actualmente se basa en cinco comidas al día, con un intervalo de tres horas entre cada una. Estas comidas son ricas en proteínas y legumbres, asegurando que su cuerpo reciba los nutrientes necesarios para mantenerse energizado y saludable. Este enfoque, combinado con una rutina de ejercicios regulares, ha sido clave para lograr y mantener su transformación.